“Decisiones personales que he implementado, y que estoy defendiendo, para llevar una vida cada vez mejor y que me guste más vivir”

Ahí van:

---

- Dejar de trabajar a las 5PM cada día

- Limitar días de reuniones 1-1 (y subirles el precio)

- Invitar a quedar al menos a un amigo por semana

- Continuar con mi práctica espiritual diaria

- Volver a hacer deporte (ayer fui a surfear con mi hermano)

- Dormir al menos 8 horas

- Organizar los planes del finde por adelantado

- Moverme por la ciudad caminando, o en transporte público, sin mirar el móvil

---

Como no tienes todo el contexto, puede que no le veas relación a lo que estoy haciendo en Mastery Leaders y a la lista que acabo de escribir arriba.

Pero yo sí se la veo.

El resumen, es que si construyes tu negocio con la única idea de que sea él quien sobreviva, crezca, se desarrolle, se mantenga… olvidándote por completo de ti mismo, como nos ha pasado a muchos, y le seguirá pasando a miles de empresarios, terminas perdiéndote por el camino, y teniendo una vida pésima.

Uno de los grandes errores que todos cometemos es cargarnos la agenda de curro.

Esto ya lo sabes.

Y es difícil parar cuando solo vendes servicios, especialmente si son servicios 1-1 (coaching, consultoría, formación…), porque tu cerebro hace rápido la asociación:

“Más horas = más pasta”


Y, como todos queremos dinero, y especialmente tú, que para eso montaste un negocio, además de para la libertad y todo lo demás, pues lo más probable es que ya sepas de lo que te estoy hablando.

Como escuché una vez en una peli:

"Solo hay dos tipos de moteros:

Los que se han caído, y los que se van a caer"


Me la llevo y la cambio por:

"Solo hay dos tipos de empresarios:

Los que se han quemado, y los que se van a quemar"


Si ya estás quemado, o sabes que lo harás pronto, también sabes que no quieres dejar de hacer lo que haces, porque es una parte importante de lo que aportas al mundo.

No es dejar tu negocio.

Ni emplearse.

Es hacer las cosas de manera diferente.

Y, ojo, que esta última frase suena a rollo “practica el desapego, recuerda lo importante, y te curarás”, pero no tiene nada que ver con eso.

Siempre he sido un tío de acción.

A mí, por suerte o por desgracia, no me vale “cambiar el enfoque”, porque necesito HACER cosas.

Y lo que he hecho para descargar mi agenda, tomar las decisiones de arriba, que potencialmente harán que viva cada vez mejor sin sacrificar mi dinero, no es utilizar ninguna estrategia mental.

Pero tiene que ver con pensar.

En mi caso, es crear un servicio que me dé el mismo o más dinero que mi servicio 1-1, el que me requiere estar a una hora determinada conectado en un Zoom hablando con otra persona, pero que me permita trabajar menos, organizar mejorar mi horario, y crear un negocio más sólido.

No dejes de hacer 1-1.

Pero ten también un servicio que puedas hacer en grupo.

Para más información suscríbete abajo.