Pasa algo curioso cuando deja el mundo de las armas: 

Tu disciplina cae en picado.


Esto me pasó a mí cuando me marché de Infantería, le ha pasado a otros de mis compañeros que también lo han hecho y le seguirá pasando, por mucho que avance la tecnología, a los soldados del futuro que vuelvan a ser civiles después de años de despliegues y misiones espaciales.


Cuando “me salí” y vi que empezaba a tomarme las cosas un poco más ligeras, me pareció que era normal que aquello sucediera.

Pero es normal por una razón que no esperaba.


Yo pensaba, iluso de mí, que al haberme convertido en civil, me estaba premiando, de alguna manera, adoptando esa actitud más relajada.

Algo como;

“Llevo 11 años viviendo en modo-cuartel, es normal que ahora me esté premiando subconscientemente transformando mi vida en un poco más cómoda…”


Lo que pasa con esto son dos cosas:

1) No es por que te estés permitiendo ser más hippie por lo que ocurre esto

2) Sea cuál sea la razón real, la caída personal, en muchos niveles, es dramática


¿Por qué?

No por lo de regalarte un descanso, no.

Es porque al cambiar de grupo, también cambian las expectativas que tanto tú como otros tienen puestas sobre ti.


Cuando eres un p*to Infante de Marina, un Légionnaire , un SEAL o un Spetsnaz, 

Y te rodeas de p*tos Infantes de Marina, Légionnaires , otros SEAL u otros Spetsnaz,

Te comportas como un p*to Infante de Marina, un Legionario , un SEAL o un Spetsnaz.

Porque así debe ser.

Porque comportarte como el soldado que te toca ser, es lo que te convierte en el soldado que eres.


Pero cuando sales de ese entorno,

Como ni tú mismo, ni nadie más, espera de ti que seas disciplinado, marcial, puntual, valiente y poderoso…

…simplemente, deja de serlo.


Esto podría estar sonándote a otra batallita de la mili de las mías, pero te la cuento porque tiene mucho que ver contigo si en algún momento de tu vida ha emprendido.

Porque cuando sales de una empresa para montarte algo por tu cuenta, ocurre exactamente lo mismo.


Grandes vendedores que resetean involuntariamente su mente de vendedor al emprender y ya no saben ni cómo hacer que les compren un PDF de menos de 20€

Marketeros que presumían de las estrategias que creaban para otros , que ahora, trabajando para ellos, se sientan cada mañana frente al PC sin saber qué se supone que deberían estar haciendo

Ejecutivos con una motivación y energía nivel charla TED , que como autónomos curran dos horas y tienen que cogerse un descanso porque están agotados psicológicamente


El entorno es mucho más importante de lo que piensas para tener éxito.

Y no solo por las conexiones.

Sino porque eres un resultado del entorno principal al que te exponen.

Si quieres leer más sobre este tema, suscríbete gratis en el formulario de abajo y te enviaré contenido como este directamente a tu correo electrónico.